31 de Julio del 2001 | |
Reino Unido | |
Steamhammer | |
Groove Metal |
01. Machine Man
02. One on One
03. Hell Is Home
04. Jekyll and Hyde
05. Close to You
06. Devil Digger
07. Bloodsuckers
08. In Between
09. Feed on Me
10. Subterfuge
11. Lost and Found
12. Cyberface
13. Metal Messiah
A través de su historia, Judas Priest siempre se ha adaptado bien a las tendencias mas pesadas del rock, es así que en los setentas lanzaron clásicos como "Sad Wings of Destiny" o "Stained Class", declarando desde un principio ser una banda de heavy metal, en una década en que el término era usado mas en modo despectivo por la crítica de rock, que como un género en crecimiento.
Ya en los ochentas ellos lideraban junto con otros de sus compatriotas el género padre del metal en sí, la NWOBHM, aún así cuando el movimiento decayó, se adaptaron rápidamente a la tendencia glam y de coros rockeros con "Turbo Lover". Ya para fines de los ochentas se proyectaron a algo mas veloz y thrasher y lanzaron "Painkiller". Después de esto no es casualidad que los proyectos del vocalista Rob Halford hayan sido de tendencias de "moda" de la época, y es así que mirábamos en la primera mitad de los noventas al metal god haciendo el ridículo con su gorrita y sus bermudas, mas pareciendo un Fred Durst arrugado que otra cosa.
La banda lo reemplazó con el gran Tim "Ripper" Owens, un tipo con una voz increíble que demostró su poderío con "Jugulator", en donde se notaba la tendencia de la banda, su camaleónica adaptación a la moda, una moda impuesta por Pantera, el groove metal, aunque no totalmente.
Y llegamos al nuevo milenio y tenemos a un Judas Priest totalmente "adaptado" a la tendencia, es así que lanzan su álbum mas odiado, "Demolition", un buen álbum de metal, groove metal, con casi nada del Judas Priest de la NWOBHM, obviamente si tienes una base de fans que creció con el sonido de los ochentas y le pones este disco, instantaneamente esto le parecerá otra banda, ya que salvo la casi balada "Close to you", por ahí "Machine Man", "Bloodsuckers" y "One on One" el resto es groove metal, bien hecho, original (dada por la voz de Owens), con riffs realmente aplastantes, que no parecieran ser hechos por la pareja de guitarras KK Downing y Glenn Tipton (que tienen la edad de mis padres), la siempre excelente batería de Scott Travis, y hasta algunos efectos electrónicos raros que se dejan escuchar por ahí.
El desenlace de la historia ya la sabemos, Halford dejó de vestirse como adolescente noventero, y volvió a las tachas sobre cuero negro, su Harley, y lanzó "Resurrection" donde hizo lo que hacía Judas Priest mejor, buen heavy metal clásico. Estando en una época en que tenías que elegir entre dos bandos: el metal clásico y sus corrientes alternativas, o la mierda del nu-metal, con su hermano mayor y casi padre, el groove metal. Era obvio, quiénes habían traicionado entonces a la "hermandad del heavy metal" . En pocas palabras si escuchabas "Demolition" eras un poser, alienado, mtv metal, etc. Y del otro lado tampoco pegaron porque no tenian la imagen de una banda "moderna" de la época. En pocas palabras, esta vez la adaptación falló, y el camaleón fue tragado.
En la actualidad con tantas fusiones, bandas chistosas, etc. en donde las malformaciones musicales se dan en pos de la originalidad, este disco puede ser apreciado de otro modo, total, Judas Priest tuvo tres adaptaciones no muy queridas, "Point of Entry", "Turbo Lover" y "Demolition", los tres buenos discos, ya depende de ti, cual es tu tendencia favorita. Yo prefiero "Turbo Lover", pero estoy seguro que muchos eligirán "Demolition".