12 de Julio del 2024 | |
Argentina | |
PopArt Discos |
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Thrash Metal, Groove Metal |
01. Ciego Para Ver
02. Malos Tiempos
03. El Diablo
04. Ya no hay Dolor
05. Veneno
06. Días Oscuros
07. El infierno que Inventás
08. Padre Nuestro
09. Espiral
10. Adiós
Cuando se piensa en leyendas del Metal argentino, nombres como V8, Hermética, Malón, Rata Blanca, Tren Loco, A.N.I.M.A.L. y por ahí algunos más aparecen en este circulo de bandas que son conocidas en todo Latinoamérica por su nivel de pegada que tuvieron al cantar en español, y recordemos que desde hace más de 30 años el idioma español es el segundo más hablado en el mundo después del chino. Por lo que es normal que estas bandas hayan tenido una pegada internacional en todo habla hispana, o por lo menos siempre llegaron con algunas canciones a muchas radios de sus años. Entonces, muchos dirán ¿Qué hago mencionando estas bandas en una critica de Horcas?... Pues es simple, porque Horcas es una banda llega al estatus de leyenda argentina, por tener una solida idea de presentar álbumes desde aquel tremendo “Reinará la Tempestad” (1990) y ellos desde 1986 jamás pararon o dejaron de producir álbumes y siempre estuvieron activos con nuevas producciones, y por ello, esta banda es una de las más solidas en su país desde finales e los 80s. Entonces, hoy en día la banda entrega su undécimo álbum en estudio llamado “El Diablo”. ¿Qué es lo que tendremos con esta banda que jamás paro en producciones?... Pues veamos
Escribir sobre Horcas siempre será un placer, porque tienen épocas en sus álbumes que marcaron poco a poco lo que hoy en día tiene esta presenta en su universo musical, porque desde aquel “Reinará la Tempestad” (1990) muchas cosas cambiaron en la música de la banda, o desde aquel “Horcas” (2002), que fue destetado por algunos, pero curiosamente ese disco fue crucial para que ahora se tenga una banda más Groove y Thrash Metal, y ya no una idea tan áspera como paso en “Vence” (1997) o “Eternos” (1999). Donde recuerdo que muchos quedaron decepcionados, pero desde un punto de vista la banda tenia que virar hacia otros vientos, y ese cambio le dio un buen resultado, y la voz de Walter Meza se estableció mucho mejor con la banda desde aquel homónimo álbum. Entonces, ahora a más de 22 de ese punto de quiebre que tuvo la banda, se tiene “El Diablo”, disco que incluye ideas más relajadas que sigue el precepto de “Gritando Verdades” (2018), el cual fue un disco regular en comparación de aquel “Por tu honor” (2013). Donde todo era más ataque y ese lado Hard Rock que los acompaña siempre, y tuvo esa energía de su disco del 2002. Entonces, ahora estos 37 minutos tienen una idea de volver en el tiempo con esa energía, pero al mismo tiempo regresar esas sensaciones Hard Rock y heavies de antaño, para darle un poco más versatilidad a este disco.
Desde que todo empieza con “Ciego Para Ver” y termina “Adiós”, tenemos un disco que empieza rudo y directo, pero poco a poco esa idea arraiga a lo Hard Rock que tiene el metal argentino sale a flote una vez más en este disco de Horcas; que como lo dije ya estuvieron mirando este contenido desde su antecesor álbum, pero esta vez con un poco más de potencia en determinados momentos y una mejor producción, porque esa fue la primera desventaja de su disco del 2018, donde se acompasaron a un lado más suave, pero la producción del disco estaba por debajo de su disco del 2013, y en ese sentido la banda revitaliza los sentidos sonoros y presentan un disco solido a nivel auditivo. Más allá de ese sonido bien logrado, el disco quiere tener esa mezcla ruda desde la primera canción y hasta casi “Días Oscuros”, luego la idea comienza a ser más sensitiva, y comienza a tener mayores texturas dentro de su sonido para cerrar el disco, y ese siempre fue el sentido de un álbum de los argentinos, siempre encontrar al final del disco más ideas y etapas que te llevan por otros rubros con esa idea groove y Thrash Metal sucia que fue uno de sus pilares desde los 90s.
“El Diablo” de Horcas es un disco que sabe cómo manejar ideas conocidas, duras y como siempre insertar ideas diversas para cerrar el disco, el cual es una particularidad desde hace buenos años. En muchos sentidos supera a su anterior, pero siempre existe un detalle que falta conectar con su disco del 2002 o 2013, con esa potencia más directa.
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