23 de Julio de 1994 | |
Suecia | |
Napalm Records | |
Death Metal |
Dentro de nuestros capítulos en el podcast de Metallerium tratamos de abarcar la mayor cantidad de bandas de recuerdos, menciones en algún momento dentro de lo extremo y metalero. Entonces, dentro de este inmenso mar en uno de nuestros episodios llegamos a hablar de los suecos de Suffer, quienes nacieron en 1988 y estuvieron activos hasta 1994, pero dentro de este último año de existencia, la banda dejaría su única producción de larga duración llamada “Structures” (1994). El cual fue editado a través de Napalm Records, aquellos años un sello novel y pequeño en comparación de los monstruos que estaba rigiendo dentro del mundo metalero como lo eran Metal Blade, Nuclear Blast, Earache y Century Media, pero gracias a producciones como esta, el sello luego entro a ser otro imponente en el mundo de hoy.
Una idea que era muy común a finales de los 80s e inicios de los 90s, fue que muchas bandas dentro de esa época se mencionaban entre si dentro de sus recomendaciones y agradecimientos en sus ediciones de cualquier, siendo ahí que la banda apareció algunas veces en muchas menciones. Luego como toda banda empezó este camino de recomendaciones, y uno de los detalles que fue en contra de la banda fue que se demoro bastante para lanzar su primer producción, porque estuvieron presentando demostraciones antes del lanzamiento de su primer opus de larga duración, y luego EPs. Entonces, esto muchas veces merma en que la música este mucho tiempo dentro del horno y vea la luz de sol como debe de ser, y encima de todo “Structures” (1994) de Suffer, sale en 23 de Julio de 1994, y luego meses después la banda se desintegra. Ósea no tuvo una correcta promoción, pero eso no significo que este primer álbum no fuera uno potente, porque a pesar de estar debajo de nombres conocidos, ese sonido sueco es memorable.
Desde que todo empieza con “Temporary Sane” con partes duras, rápidas y directas, la música es Death Metal de escuela sueca al máximo, quizá con mucho de otras bandas del momento, pero que debido a su calidad de desconocido hoy en día supe que estaba en lo correcto en el momento en que comenzó a sonar la primera canción, la breve melodía armónica me enganchó al instante. Después de eso, ya tenemos el primer riff increíble del álbum. Es muy agresivo, crujiente y rápido. Luego continúa con un trabajo de guitarra más sutilmente melódico en canciones como “Passionate Structures”, “Lies Within” o “Selected Genes” varios cambios de tempo y muchos ritmos interesantes, que no son espectaculares, pero son contundentes. Los solos se pueden encontrar en la mayoría de las canciones, principalmente acompañados por una parte maravillosa de ritmo lento a medio tiempo, donde la guitarra principal eclipsa a los otros instrumentos, pero toman el asiento trasero sin que nadie lo solicite como en “A Frenetic Mind” o “Maginary Homecoming”.
Terminando el álbum se tiene “The Killing Culture” y “Freedom of Speech”, que cierran esta obra maestra con broche de oro. Porque este “Structures” (1994) de Suffer, es un álbum realmente que no se centra en un instrumento o que eclipse a otro. Los gritos y bramidos del vocalista son satisfactorios, realmente puedes escucharlo sacando el aire de sus pulmones, agregando otro toque de agresividad. La producción es bastante limpia, pero no pulida, y como debe ser para un disco de este tipo. Entonces, si quieres verlo en el mundo para comprar, pues te digo que es un disco extinto y los precios al día de hoy son exagerados, pero vale la pena. Un éxito oculto y bien hecho.