06 de Octubre del 1998 | |
Reino Unido | |
Peaceville Records | |
Doom Metal |
“34.788%... Complete” (1998) de My Dying Bride, es un disco que todos los que vivimos su lanzamiento, fue apabullado por la prensa e inclusive por la banda misma, porque no quería saber de ese disco, pero la verdad de todo, es que como siempre la idea de esperar lo mismo o aquello que te haga recordar a su pasado, prima bastante. Porque la sociedad estaba mejorando, se estaba adaptando a la nueva ola de New Metal que estaba pegando en todas las radios y demás, por lo que esperar sonidos alternativos y modernos dentro de una banda que te puso en la mesa siempre Doom Metal, pues era pensar que se habían vendido o se habían para lo más mainstream de MTV. Pero no, este es un disco inmenso que sufrió las penurias de las revistas, por apegarse a un concepto clásico y tradicional de como debería ser el camino de los británicos.
Mi acercamiento de este álbum fue cuando un amigo me lo paso en cinta y estaba metido dentro del new metal, porque esa persona creí que era alternativo u otro de esos estilos, pero yo le dije, ellos vienen de otro fondo musical como lo es el Doom Metal y tienen grandes álbumes antes de este. Porque cuando le hice escuchar discos pasados y pasábamos a la ronda de canciones de este “34.788%... Complete” (1998) de My Dying Bride, las cosas eran muy distintas, Aaron ya no guturaba en el disco, los violines desaparecieron y la voz tenía bastante efecto que se parecía a lo que hacía Chino Moreno en Deftones, pero como lo dije, es solo una idea de enlazar ideas, más no que los británicos tengan influencias de ellos, y lo digo porque Andrew, guitarrista de My Dying Bride lo confirmo en una conversación pasada que tuvimos. Por eso, solo ideas y cosas que pasaban y que la banda quería experimentar, y dentro de eso salen los 56 minutos de puras dosis modernas, y que se aleja completamente de un concepto lirico, visual y musical de discos anteriores y siguientes, porque si ves la portada y la comparas con un disco anterior como “Like Gods of the Sun” (1996) y con “The Light at the End of the World” (1999), te darás cuenta que el concepto se aleja de antes o después, y estamos ante la primera oveja negra de la banda.
Desde que todo empieza con “The Whore, the Cook and the Mother” y termina con “Under Your Wings and into Your Arms”, para muchos puede ser chocante si estuviste pegado con sus anteriores discos, pero si desgranas las canciones una por una, te darás cuenta que los lados rítmicos son los de siempre en la música de la banda, y que el uso de mayores efectos le da ese cambio global a su música, luego bajo y batería se mantienen, pero añaden ese uso de un bombo asimcopado en muchas de las canciones y que es parte fundamental del metal alternativo. Entonces, esa fusión de cosas clásicas y modernas para su época te hacían ver las cosas distinto, pero que en el fondo pertenecían al mismo sonido de la banda, ya que en canciones como “The Stance of Evander Sinque” puede escuchar el camino que ellos usarían en “Songs of Darkness, Words of Light” (2004), 4 años después o sino tener algunas dosis de lo que iba a pasar en “A Map of All Our Failures” (2012), y obvio la banda tenia esas partes densas y pesadas junto a teclados y voces desesperantes dentro de esta canción que beben directamente de “Turn Loose the Swans” (1993). Ósea si eres curioso, encuentras todos estos detalles dentro de su música pasada y su música futura, y solo detalles como voces de mujeres y violines están exentos de la composición de las 7 canciones.
Quizá sea uno de los pocos que acepto todas las épocas de My Dying Bride, por eso cuando “34.788%... Complete” (1998) llegó a mis oídos desde el primer día, siempre fue un disco que no tiene comparación en su discografía, pero que ayudo al crecimiento musical de la banda con nuevas ideas que estaban desde 1998 y hasta su última producción “The Ghost of Orion” (2020). Así que, por más que duela a los tradicionales de finales de los 90s, este disco es un clásico innegable y que debió tener más atención, y si la banda lo rechazo en su momento, es normal, porque los medios eran los que abusaron de su potestad de decir que era bueno o malo. Pero se equivocaron y ahora se tiene un contexto distinto y este disco envejeció muy bien.