15 de Diciembre del 2023 | |
Singapur | |
Pulverised Records | |
Death Metal, Black Metal |
01. Aeternalis Diaboli Satanas
02. Corporeal Adversaries
03. Infernal Storm Of Oblivion
04. Marauders Prayers Of Profanation 03:17 video
05. Terrorized Consecration
06. Asmodei Bestialust Conjuration
07. Blazing Acheronic Tyrants
08. Diabolatry
Recuerdo que conversaba con un amigo acerca de las diferencias entre el Death Black Metal estadounidense con el europeo, y dentro de esa conversación salieron nombres como Necrophobic, Belphegor y Grotesque, que vienen a ser nombres de la realeza extrema en ese estilo; entonces desde el lado americano se tiene a Blasphemy y Angelcorpse que hicieron las cosas más violentas en todo sentido, dejando ese lado melódico y oscuro que tienen las bandas europeas, con algo más agresivo y violento en todo sentido. Pero dentro de esta idea de bandas agresivas y violentas, nombres como Impiety, Infernal War, Azarath y la nueva camada de bandas polacas le dieron otro giro a la música de ellos. Entonces, dentro de esta idea, recuerdo que salió el nombre de Infernal Execrator manteniendo este trayecto agresivo, salvaje y violento que debe de tener esta mezcla. Y de como esta banda con dos álbumes tienen algo realmente agresivo y que no da cabida a nada; entonces, luego de 5 años se tiene “Diabolatry”. ¿Qué es lo que tendremos en este nuevo disco?... Pues veamos.
Desde la primera vez que escuche Infernal Execrator con “Ad Infinitum Satanic Adherent” (2014), la sensación más agresiva y salvaje que hizo Angelcorpse, es lo primero que me llamo la atención hace 9 años, y desde esa vez seguí su camino con sus siguientes producciones hasta llegar a este “Diabolatry”, disco que hace honor a esa potencia estadounidenses elevada al mismo estilo de Infernal War, con cosas más salvajes y violentas. Y aunque su música no traiga nada de novedoso, esto es violencia pura en su presentación más iracunda, donde todo es sanguinario, extremo, filoso y con esas dosis de necesarias para tirar todo el odio por la ventana, porque los singapurenses arremeten con todo y no dan tregua en ninguna canción. Algo que muchas veces se perdió en el metal extremo de hoy, donde prefieren tener más virtuosismo, que ideas salvajes y chacales que te destruyen el oído en todo momento, y no dejes de escuchar el álbum en ningún instante. Toda una evocación a lo malvado y montaraz de esta fusión deather y blacker.
Desde que todo empieza con “Aeternali Diaboli Satanas” y termina con “Diabolatry”, esto es metal extremo aguerrido, salvaje y directo a la medula; y dirigido para quienes esperamos solo metal que te mete un puñete en la cara y no deja nada a la idea de cosas progresivas, técnicas o que sea experimental, nada de eso, solo metal brutal y con esa idea de desvicerar cualquier oído del planeta. Donde como se dijo, tendrá un sonido y una inclinación muy parametrada, pero encaja bien todo lo que hace y te da en la yugular de la música agresiva, porque eso es lo que debe de hacer el metal extremo, samaquearte hasta el último centímetro de tu cuerpo, escuchas y lo único que debes de encontrar es violencia bien determinada y dirigida para empezar las batallas sangrientas en las cordilleras del Gorgoroth, peleando con humanos, bestias mitológicas y entidades de todas las dimensiones de la tierra. Donde la guitarra es filosa y mezcla muy bien todos los puntos brutales que deben de transmitir música de este tipo, batería que no hace más que lacerarte los oídos con el blast beat, el bajo como siempre en este estilo esta desaparecido, pero no es necesario que tenga una presencia brutal, sino que tenga la potencia necesaria para sacudirte todo el cuerpo, y finalmente la voz tiene ese enfoque desgarraror y vehemente que encaja a la perfección dentro de la parafernalia inhumana que tienen los 37 minutos.
“Diabolatry” de Infernal War, es un digno sucesor de su anterior disco, y de su discografía en general, enfocado a reventarte los tímpanos con toda la agresividad que tiene el disco. Si quieres monstruosidad y bestialidad a diestra y siniestra, los 37 minutos evocan maldad en todo su contenido y transmiten ensañamiento y ferocidad todo el tiempo. Un gran disco para fin de año.
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