19 de Marzo del 2002 | |
Suecia | |
Nuclear Blast | |
Melodic Death Metal |
01. Don't Judge Me
02. Destroyed
3. On the Edge of Madness
04. A Public Puppet
05. Uncontrolled
06. Turn the Page
07. Hatred
08. Another Dead End (for Another Dead Man)
09. Seeds of the Chosen One
10. All Turns Black
Hypocrisy es de aquellas que se pueden considerar dentro del mundo Death Metal que hizo lo quiso dentro de su línea musical, desde sus brutales inicios en sus dos primeros álbumes con esa matriz muchos más estadounidenses, luego discos medios doomers y luego su establecimiento Melodic Death Metal en discos que llegaron a mediados de los 90s. Y para quienes seguimos su carrera con cada disco, siempre encontramos un Hypocrisy distinto y atrevido en todos sus álbumes, y aunque algunos discos sean predecibles con su fórmula, este de igual manera no falla en presentarte buenas canciones y un disco sólido, además de mencionar que es una de las pocas bandas dentro de Nuclear Blast que jamás cambio de sello en sus 13 álbumes editados en sus más de 30 años de existencia como banda o desde que tuvieron su primer nombre en 1998 que fue Seditious. Así que, tenemos a una banda que tiene una libertad inmensa para componer y cada disco será una sorpresa, por lo que esta vez, los suecos entran dentro de esta sección de discos no muy mencionados y rechazados en su momento por su 8vo disco en disco llamado “Catch 22” (2002). El cual en su momento recibió grandes detractores de fanáticos y muchos comentarios negativos.
Eran inicios de los 2000s, y como todos saben ese pseudo movimiento mal llamado Nu Metal comenzó a tomar posesión de todos los medios a la fuerza y eso escuchabas en cada esquina, así que Hypocrisy dentro de aquellos iba a presentar un disco que se iba a alinear dentro de ese movimiento, pero no como los medios lo esperaban, sino con su propio enfoque y comenzaron a mezclar ideas un poco más alternativas con su esencia melódica, y le salió un disco que fue rechazado por casi todos en su momento. Es más, recuerdo cuando mi compañero de la era cinta escucho este disco y hablamos de este en su momento, lo dijo que la banda se vendió en muchos sentidos y quiso pertenecer al movimiento del momento, y en realidad no se equivocaba, porque este disco tuvo esa idea de decir, nosotros estamos acá hace mucho y somo adaptables a lo que esta pasando. Luego otros fanáticos de la banda que se quedaron en los dos primeros álbumes, les ponían este “Catch 22” (2002) en el reproductor, y ni entendían lo que estaba pasando en sus oídos, y así muchas historias más se pueden contar de muchos lados, porque este disco hasta el día sigue siendo uno de los más bajos en calificación.
Desde que todo empieza con “Don't Judge Me” y termina con “All Turns Black”, si eres exquisito con el disco y esperabas otro “Into the Abyss” (2000) o su época más melódica como con “Abducted” (1996) o lo que vino después con “The Arrival” (2004), pues esto era un golpe en la cara, porque no tenia nada de esos discos o los que vinieron después; pero para quienes iban a la par con los cambios y sensaciones de álbumes, pues encontrabas formulas conocidas hechas por Peter Tägtgren, Mikael Hedlund y Lars Szöke en el pasado, y le añadían una producción deacuerdo a las exigencias de los años, el sonido de tarola era mucho más agudo y que podía traerte ese sonido parecido al “St. Anger” (2003) de Metallica que salió un año después, pero este sonido de tarola agudo tenia ese sabor de bandas alternativas de inicios de los 90s y era normal porque esa fue la intención de la banda. Luego en muchas canciones hay detalles que se apegan al concepto de lo que estaba haciendo Peter con Pain, y tenían esos sabores industriales que le daban otras sensaciones, pero en canciones como “On the Edge of Madness” u “Uncontrolled” su sabor melódico seguía al rojo vivo, pero la producción cambiaba todo y muestra de eso “Turn the Page” tenían un sabor groove medio alternativo de bandas de mediados de los 90s en ese estilo, e inclusive un poco de lo que hizo Max Cavalera con Nailbomb.
“Catch 22” (2002) de Hypocrisy es un disco que cambio la perspectiva de ver la banda para muchos, pero demostró que ellos no tenían límites y podían hacer lo que les da la gana y lo siguen haciendo. Un disco que luego fue regrabado con versiones mas graves en los guturales, pero jamás llegó a parecerse a la primera versión que la misma banda comento en un pasado video, que la versión del 2002 es la versión que más le agrada, porque se siente más real que dar al publico lo que espera. Porque es Hypocrisy.