Uriah Heep es uno de los nombres grandes del Hard Rock de la década de los setentas, que a la par con otros monstruos británicos de esa década brindó grandes obras que ahora son inmortales, y que con la salida de muchas bandas retro actualmente quizás hayan quedado en el olvido, pero lo cierto es que los originales seguirán siendo los mismos, y dentro de esa lista, esta banda llegó a ser en su momento de las mas originales siempre con ese toque progresivo que no tenían sus otros compatriotas. Aquí les presentamos una lista sencilla de los discos mas recomendados de Uriah Heep, que obviamente son sus primeros trabajos, que ahora son imperecederos, y que seguramante serán revividos en su nueva visita por tierras peruanas este 5 diciembre del 2023, el cual es un concierto organizado por Atenea. Entradas AQUÍ.
El debut de la banda, criticado por que era uno de las que tenía ese mismo sonido de órgano Hammond de Deep Purple, banda con la que compartían en el momento la sala de ensayo. Sin embargo, el uso de guitarras slide y otros elementos hacen que no haya tal similitud o base para acusar de plagio a la banda. El álbum tiene una de sus piezas progresivas famosas llamada "Gypsy", y la balada "Come Away Melinda",
Uriah Heep en este disco suena mucho mas pesado que en el debut, y debo admitir que la primera vez que escuché "Bird Of Prey", pensé que era alguna grabación perdida de Mercyful Fate, con esos agudos raros de Byron, y escribo raros porque no se realmente la intención que tuvieron al colocarlos, pues para la época debió sonar algo tétrico, y supongo que este material debió ser influencia para el rey de diamantes danés. El falsete de Byron empieza a hacerse mas habitual a partir de este disco, y escuchar canciones como "The Park" mantienen ese toque cálido y a la vez fuerte y misterioso como todo este disco. Ken Hensley introduce sin miedo sonidos conectados mas con el jazz lo que en el momento los alejó totalmente de esus competidores. La potencia de "Lady In Black" podría considerarse ya un peldaño para el heavy metal como una evidente raíz.
Solo estos músicos monstruosos podrían sacar dos álbumes de alto calibre en sólo un año, a los meses de "Salisbury", lanzan este otro trabajo icónico, en el que ya la banda encuentra su sonido definido y evolucionado, así de la potente "Look At Yourself", pasando por la emotiva, progresiva y misteriosa "July Morning", otra vez las guitarras slide en "Tears In My Eyes", o algo que se haría un sello propio, presente en "I Wanna Be Free", sonando potentes en guitarra y batería, pero con unas melodías en la voz mas cercanas a The Beatles que a otro grupo pesado, y es que muchas veces el juego de voces de Uriah Heep asemejaba a lo que hacían sus compatriotas de Liverpool. Sin duda, en este álbum se consolida su estilo o al menos el que los llevó a la fama.
Este es sin duda uno de sus mejores discos y por ende uno de los clásicos de la historia del rock en general. Es también el debut de la formación clásica de Uriah Heep, porque fue la que presentó sus mejores obras, y es que al talento y magia de la voz de David Byron, al muro de guitarra que hasta ahora ofrece Mick Box y al talento sorprendente del tecladista, guitarrista y cantante Ken Hensley, se sumaba la potencia de la batería de Lee Kerslake y uno de los bajistas mas talentosos que he podido escuchar en mi vida como Gary Thain. Este disco a parte de tener canciones tremendas como la balada mágica "The Wizard", la rock and roll "Easy Livin'", la progresiva "Circle Of Hands", o la doomy "Rainbow Demon", introducía letras épicas y de contexto de fantasía que ahora es usado mucho en géneros como el power metal.
Otro año con dos álbumes bajo el brazo, y qué álbumes..."The Magician's Birthday" continúa con la temática épica y fantástica de "Demons and Wizards", esta vez llevados al campo conceptual, y desde "Sunrise" pasando por la casi psicodélica rock and roll "Sweet Lorraine", la proto Iron Maiden "Blind Eye", la doomy "Echoes in the Dark", o la épica "Tales", este disco es una mezcla de muchos elementos que dejaron huella hasta nuestros días, y que no es replicada con éxito ni por la misma banda. Estos dos álbumes de 1972 de Uriah Heep no deberían faltar en la playlist o colección de cualquier amante no solo del hard rock o rock, si no de la música en general.