Mortician, una de las bandas más influyentes desde los 90s y hasta nuestros tiempos de bandas Brutal Death Metal, Grindcore en todo el mundo. Especialmente por sus introducciones, su afinación graves y pesadas, su forma de hacer música bruta y opaca en muchos de los sentidos. Entonces, hacer un ranking de lo mejor peor de esta banda de banda cola en el mundo, es un deber como amante del estilo extremo, y aunque muchas opiniones en la red digan que es muy fácil hacer este ranking, porque la banda no sale de su zona de comodidad en todos sus álbumes, yo creo que la mayoría solo apuesta por el primer disco y de ahí no quieren ir para otros álbumes, porque dicen que la mayoría suena igual. Así que hacemos este ranking para desmentir eso.
Un disco que inicialmente salío por el sello de la banda Mortician Records, el cual edito todas las producciones de la banda en distintos formatos. Donde se tiene como detalle curioso que la banda lanzo copias super limitadas de este álbum para su gira en el 2002 en Estados Unidos, pero luego Relapse Records al ver el éxito del álbum y de como se esparcía entre brutales, lo deicidio sacar por medio de ellos y con una portada nueva. Entonces, ¿Por qué este disco entra en este lugar?... La razón es muy sencilla, porque en este álbum la banda no decide ampliar sus horizontes a nivel de las guitarras, se conforma con hacer una y otra vez lo que hicieron en discos pasados, y no salen de su zona de comodidad, siendo ese detalle que choca dentro de una discografía intensa a nivel rítmico, porque no podemos hablar de la batería debido a que es electrónica y/o programada.
Para que este disco este dentro en esta posición tuve que escuchar muchas veces el álbum, porque a nivel rítmico, es un disco superior a sus dos primeras producciones y tiene una intensidad más avasalladora. Pero el problema del disco no reside en la técnica o detalles de ejecución, sino en la producción final en el sonido, porque es el álbum más opaco de toda su carrera y la mezcla no es la ideal, sin olvidar que la voz de Will Rahmer esta muy producida en estudia y tiene un efecto muy grueso que a medida que escuchas la brutalidad, el oído vibra por la mala mezcla del disco. Aun así, es un disco que supera a muchas copias de la banda en todo el mundo, porque ese lado Slam que iba a ser copiado por muchas bandas, es siempre adictivo dentro de su música. Sin olvidar que la portada hecha por Wes Benscoter, es hoy en día un clásico brutal para los amantes del estilo.
Al hacer este peor a mejor de Mortician, muchos esperarán que este primer disco este en el primer lugar o en el segundo, pero la verdad es, que no. Porque es un disco pobre en ideas comparadas a nivel de ritmos de guitarras, es muy conformista en ideas, y la batería programada suena realmente horrible. La mezcla de los instrumentos es pésima, no se entienden bien las guitarras y los riffs cuando todo se acelera, el bajo toma bastante predominancia sin un control medido. La voz es lo mejor de todo frente a la música muy conformista, podremos decir que este disco está en esta posición porque es la primera producción de la banda, porque de una discografía que pueda ser lo mismo en riffs, la banda supo como darle mejores formas a su música dentro de ese pequeño cuarto de cuatro paredes que tiene la banda. Así que, original existe en este disco y que fue copia para muchas bandas, si lo fue. Pero que la banda hizo mejores cosas. Pues lo hizo, porque, aunque lo haya vivido en su momento, dejo de lado la nostalgia y me enfoco en lo que la banda pudo seguir mejorando.
Este es un disco que injustamente es colocado como el peor, debido a que leí muchas reseñas y opiniones, y lo curioso dentro de este tema es que todas esas malas reseñas y opiniones dicen lo mismo, que la banda se para otro enfoque en lo rítmico. Y realmente lo es, porque las cosas son más limpias, los ritmos se entienden claros, comienzan a ser mucho más técnicos que antes y la voz de Will Rahmer está en su mejor momento, con esa cruda, opaca y profunda que no necesita más efecto. Y la batería programada suena mejor que nunca. Entonces, todos esos detalles para los cerrados de mente y con ideas de los 80s, no les gusta, porque es un Mortician mucho más empilado, limpio y con ganas de ver el nuevo mundo extremo. Y a aquellos que digan que prefieren el “Hacked Up for Barbecue” (1996), es porque se dejan llevar por la nostalgia, ya que canciones como “Burned Alive” de su último álbum, es técnicamente más original y pulida que cualquier canción de su primer álbum. Un disco que debería estar en muchos más tops que solo el primer álbum. Y como no me dejo llevar por la nostalgia de una época, aunque la haya vivido, tengo que decir que este disco estaba mucho mejor que obras previas.
Para quienes no tuvimos la oportunidad de ver a Mortician en giras y con baterista real entre sus filas durante sus épocas de apogeo, porque no había Youtube u otro medio visual para verlos en vivo, salvo su concierto en VHS llamado “Home Videos Volume I” (1999), el cual era muy difícil de conseguir y que pude hacerlo años después de su lanzamiento y después de haber escuchado este álbum de canciones regrabadas. “Final Bloodbath Session” es el álbum que necesitabas para entender que toda esa brutalidad era insana y se podía hacer sin introducciones de película, solo música brutal, opaca y agresiva que te mutilaba los oídos, siendo de aquellos discos que te ponían la piel de gallina con cada canción, porque el sonido de batería, sonido de tarola y toda la mezcla en general es una maravilla. Porque, estabas escuchando toda la masa enfermiza con una batería real y la música era mucho más brutal, escuchar esos errores de ejecución en la música y en la batería fueron un placer, porque te hicieron demostrar que eran humanos haciendo música realmente enfermiza y visceral, y solo cuatro personas en estudio haciendo música brutal. Un tributo a la enfermedad que necesitaba este tipo de reinvención en sus clásicos.
Y llegamos al final de esta lista con el segundo álbum de estos enfermos de lo brutal y extremo. Donde “Chainsaw Dismemberment” (1999) es la obra máxima de Mortician, por dos simples hechos, acá la banda decide tomar su personalidad abrumadora en serio, los efectos de guitarra son más gruesos, y la afinación pesada de las guitarras es todo un lujo de escuchar, pero lo más importante de todo y como segundo punto importante, es que fue la primera y única vez que Roger J. Beaujard se dejo apoyar en las composiciones junto a Desmond Tolhurst. Por eso este disco es otro danzar dentro de su propia discografía, es una banda más técnica, más brutal y con más espacios para armónicos duros y pesados que le dieron la personalidad que ahora tiene esta banda en el mundo. Y lo mejor de todo, la mezcla y producción son excelentes, todo se entiende claro y fuerte, sus ideas no se repiten, no se ponen lentos innecesariamente como en su primer álbum. Acá existen mayores dosis de música brutal, dinamismos, no se quedan tranquilos haciendo solo quintas en la guitarra, o notas pesadas; la banda decide ampliar sus horizontes gracias al uso de tres cabezas y todo es un lujo de escuchar desde que empiezan con “Stab” y termina con “Lord of the Dead (Mortician Part II)”.