Japón siempre será un país mítico, por sus costumbres, su población y su disciplina que comenzó a expandirse por todo el mundo. Por lo que, cada vez más personas están comenzando a ver este país con mejores ojos dentro de cualquier expresión artística. Entonces, con Metallerium tratamos de recopilar discos perdidos dentro del Death Metal en los 90s, porque recordemos que este país, a pesar de ser una potencia mundial en muchos sentidos. Jamás pudo exportar un sonido dentro de los 90s o bandas que dieran la talla a bandas grandes del estilo a nivel mundial. Las razones de porque se dio esto, no radica en que la personas eran cerradas u otro motico alterno; pues no, la idea radica en una idea ancestral y milenaria, que primero apoyan sus recursos artísticos de primera instancia y luego el resto del mundo. Siendo algo que esta desde tiempos milenarios en su cultura, de no querer exportarla al mundo, o de no dejar entrar extranjeros a su gente o cultura, y muchas más que son interpretadas en películas, series, etc, a nivel mundial.
Por ende, en la última década sin tecnología o sin redes sociales, sin una expansión gigante de internet, era imposible ver bandas de Black Metal, Doom Metal o Death Metal que emergieran del país del sol naciente, pero eso no significo que estos estilos tuvieran breves experiencias musicales dentro de los estilos extremos, siendo así que luego de algunos meses dando vueltas a esta idea, empiezo con discos que solo son recomendaciones, más no piedras influyentes dentro del Death Metal a nivel mundial, y solo estarán ordenadas de manera alfabética, y no por grado de importancia en la última década sin tecnología que fue los 90s.
Otra banda que este 2022 esta cumpliendo 30 años de existencia, porque ellos se formaron en 1992 y estuvieron activos hasta 1997, un año después del lanzamiento de esta obra goregrind de muchas chispas Death Metal. Donde la banda en su creación siempre fue una banda de dos personas, quienes se encargaban de todo y hacían las cosas con batería programada. Siendo para algunos un poco chocante como siempre dentro de los más puristas, pero, por otro lado, para aquellos que estaban muy relacionados con bandas de cybergrind de finales de los 90s, pues esto, era una delicia musical. Así que no existe mucho problema en este sentido, salvo por la idea de cambio de nombres que tuvieron desde 1997 hasta el 2008 por Vampiric Motives, pero que jamás lanzo una producción de larga duración.
“The Encyclopedia of Serial Murders” (1996) de Catasexual Urge Motivation viene con dos portadas: en un lado del folleto está la portada que se muestra con las geishas colgadas, mientras que el otro lado es una versión "limpia" de la carátula del álbum, que presenta solo un fondo negro sólido con el logotipo de la banda y el título del álbum en japonés. Tanto el título en inglés como en japonés están escritos en el propio CD. Entonces, con esta idea desde que todo empieza con “Mutilation, Rape and Serial Murder as Modern Metaphor” y termina con “Vivid Stains in Hematomania's Delirium”. Se tiene una claridad en la producción de este álbum, porque es poderosa para haber sido lanzado a mediados de los 90s. Casi suena moderno. Donde las guitarras tienen una afinación extremadamente baja y con mucha distorsión de guitarra, con riffs rápidos. Luego el bajo es realmente agradable y pesado en el fondo, y su potencia hace que las guitarras suenen mucho más gruesas y finalmente una batería electrónica que tiene un tono agradable y nítido, con una reverberación profunda que lo hace realmente grotesco y parte del estilo.
Aunque no tiene mucho que ver con la idea dentro de las recomendaciones de bandas Death Metal, una banda Grindcore siempre tiene algunas chispas del género de muerte que nutren su música en el mejor de los campos, y en ese sentido los japoneses de Clotted Symmetric Sexual Organ, sin necesidad de ser una banda que tenga dosis Death Metal por toneladas, o por así decirlo, no llegan al 5% de su influencia deather en su primer disco. Añado esta banda más, debido a que existían muy pocas bandas extremas en el Japón de los 90s que estaban activas o presentarán discos acordes a lo que pasaba en el mundo exterior. Por ello, “Nagrö Läuxes VIII” (1996) sin ser una piedra dedicada al genero de muerte, es una buena muestra de como los japoneses siempre fueron fanáticos de los noise y extremo en la música.
Una de las cosas más llamativas de la escena grindcore en los 80s y 90s a nivel mundial, es la gran influencia que el noise japones tuvo en todas las bandas del mundo, hablando de Terrorizer, Napalm Death, Brutal Truth y más bandas cabeceras del estilo. Por ello, en mi viaje de siempre estar pendiente y ver qué pasaba en épocas inciertas del metal, bandas de todas partes del mundo comenzaron a exportar su música, y una de ellas es Clotted Symmetric Sexual Organ o más conocidos solo por las sigas como C.C.S.O. Porque con esa abreviatura, la banda se volvío más conocida, y por todos los Splits y producciones pequeñas que estuvieron lanzado desde 1993 hasta su primer álbum “Nagrö Läuxes VIII” (1996). Un disco desde que todo empieza con “Daddy's Home” y termina con “Zombie Fuck”, tiene ese lado intenso, bizarro, caótico, burlesco, gore y noise que los hace una en un millón, y con una caratula que no tenía decía nada, pero que años más tarde se volvería tendencia en bandas como Cock and Ball Torture, Alienation Mental, Ingrowing, Isaccarum y más.
A pesar de ser una banda que empezó sus actividades a inicios de los 90s, para ser más específico, en 1992. Defiled jamás pudo concretar un primer álbum hasta 1999, pero antes de este hubo pequeñas producciones como su primera demostración de 1993, luego su primer y único EP “Defeat of Sanity” (1994) y finalmente una cinta promocional para 1998, el cual mostraban lo que iba a venir en su primer álbum. Entonces, por lo mencionado en el texto introductorio, la banda demoro 5 años en grabar su primera producción, y ¿por qué digo 5 años?, porque “Erupted Wrath” tuvo como año inicial ser lanzado en 1997, pero debido a problemas con Bizarre Records, se tuvo que cambiar de sello para 1999 con Nightfall Terrorizer Records y después de haberlo promocionado en su primer concierto en Corea del Sur en 1997. Y luego de un año, presentarlo en Florida junto a Monstrosity y Angelcorpse.
Defiled en este “Erupted Wrath” (1999) no quiso descubrir la pólvora en este primer álbum, pero su música va enfocada a partes muy rápidas y técnicas, algunas a veces abruptas y otras de mayor complejidad. Siendo un disco complicado de escuchar desde que empiezas con “Fall into Dilemma” y terminas con “Defeat of Sanity”, pero la idea sangrienta, cavernosa, técnica y agresiva de los 30 minutos son para sacarse el sombrero, porque existe una brutalidad técnica y sin un parámetro establecido, pero teniendo una producción opaca dentro del Death Metal, y lo mejor de todo, aunque tenga algunos ritmos brutales, la banda jamás dejo la etiqueta del género de Muerte. Un disco infaltable en toda colección rara de Death Metal, y ojo, el EP no es mejor o peor, solo que en su primer álbum llegaron a su sonido ideal compositivamente.
Después de su lanzamiento enfocado en la vieja escuela dentro de su demostración de 1992, Eroded lanzó su disco debut que se ramifica en múltiples subgéneros, algo que la mayoría no esperaría de una banda de Japón en aquellos años. Siendo hasta el día de hoy la única larga duración que tuvo esta banda hasta el día de hoy, pero para los amantes de lo desconocido y de muy difícil acceso a primeras impresas, la banda decidió reeditar el disco en una versión doble, incluyendo canciones de su arcaica demostración de 1992 a través del mismo sello Ritual Records.
“In” (1992) de Eroded es un buen disco infravalorada y perdido en el tiempo, y una de las mejores bandas que han salido de la escena del death metal de Japón durante aquellos años. No recuerdo de dónde me enteré de ellos, pero me alegro de haberlo hecho. Es una pena que se disolvieran y nunca continuaran produciendo más música. Aparte, el vocalista que se unió/comenzó una banda de grindcore tres años después, no hay nada sobre el resto de los miembros de la banda. Porque cada canción desde que empieza con “Blind Line” y termina con “Turning Time”, presentan altas dosis de Grindcore dosificado dentro de parámetros Death Metal y una voz muy parecida a la de LG Petrov mejorada, con algunas dosis rock and roll, y por momentos todo se hace una transición molesta de música maravillosa que tenia para mucho más, pero el resultado fue otro.
Hellchild probablemente sea la banda más vieja del país del sol naciente, porque iniciaron sus activadas a mitad de los 80s, con una presentación oficial en 1987. Luego aparecieron en muchos compilados desde 1988 y hasta los 2000s. Siendo una de las bandas más icónicas de Japón, donde muchas personas cerradas o encapsuladas en el tiempo, se cierran en la idea de reconocer a esta banda por su EP “…to the Eden” (1992) y algunos por su primer álbum “Where the Conflict Reaches” (1993). Pero técnicamente y a nivel musical, son discos insípidos, donde viene el dicho “¿Por qué es necesario recordar el primer álbum y no lo que vino después? Es simple, solo nostalgia a lo que alguna vez se conoció y no querer salir de ese cuarto de 4 paredes.
En lo personal, mi encuentro con Hellchild fue con el primer álbum, donde la banda mostraba una idea insípida de que era una banda más en el mundo, y en muchas opiniones de la época, dijeron lo mismo. Y como el mundo es así, si no agradas a la primera, las siguientes producciones no son relevantes; entonces, yo por curiosidad continue con ellos y saber que pasaba después, así que a mis oídos llegó “Circulating Contradiction” (1997). Donde su Death Metal en 4 años había madurado y tenían a un maquina rocker, groove y de muchas dosis personales dentro del genero de muerte, además de que desde el saque la edición en física del disco en sus dos versiones, tanto la original como la remasterizada, tienen mucho mejor perspectiva frente a la idea paupérrima de sus antecesores, perdonen esto. Será el empiezo, pero eso no significa que la banda no pueda mejorar, porque Hellchild lo hizo y creo su personalidad, aunque no de manera influyente en el mundo, pero desde que todo empieza con “Caress Wounds” y termina con “Raise the Right Fist”. Su música es realmente sorprendente, y de cómo Tsukasa Harakawa en las voces tiene un vozarrón inigualable; y aunque la banda haya cesado sus actividades en el 2001 y ahora estén de vuelta, lo hecho en 1997 es todo un monumento al estilo.
Formados en 1991 bajo el nombre de Euthanasia, y que estuvo activo hasta 1994 bajo ese nombre, porque el mismo año la banda se cambió de nombre al que se conoce, Intestine Baalism. Con cuyo nombre lanzaron antes de este “An Anatomy of The Beast” (1997), dos producciones, su demostración de 1995 llamada “The Energumenus” y el Split junto a Catasexual Urge Motivation, Desperate Corruption y Saprogenic Entrails. Donde la banda se dio a conocer a los oídos de Dave Rotten, quien en sus viajes y su directo a apoyo a todas las bandas desde hace 30 años, siempre trajo consigo novedades. Siendo esa la idea de este primer álbum de los japones, el cual es incomparable hasta el día de hoy.
Mucho se tiene que hablar de esta primera producción de Intestinte Baalism, porque es Melodic Death Metal de alto calibre, pero con una cavernosidad inigualable. Debido a las afinaciones super bajas que tiene la banda en las guitarras y la voz de Seiji Kakuzaki, quien es un enfermo al momento de cantar desde que empieza con “Corporal Celebration” y termina con “Tyrant”, pero la genialidad de los casi 40 minutos, no proviene de la voz y sus distintos matices o el efecto nocivo de las guitarras, sino la capacidad de mezclar ambientes ultra melódicos, con esa dosis finesa o de muchos cortes estadounidenses al estilo Incantation, pero con una maestría inigualable que opaca a muchas otras bandas del mundo en ese sentido, e inclusive es una de las pocas veces que una banda de Japón tenia un sonido finlandés, pero al mismo tiempo le colocaba sus partes románticas y suecas en todas las canciones, y que se te pegan en instantes, e inclusive puedes tararearlas durante horas haciendo cualquier actividad, ese es el nivel de crudeza y melodía que pudo llegar Intestine Baalism. Un disco infaltable en toda colección extrema.
Otra de las bandas más longevas del mundo japones extremo, y una de las pocas en tener muchas cosas dentro de su música, siendo una de las primeras bandas en su país en presentar cosas abstractas, brutas y salvajes en muchos sentidos; además de ser una de las primeras bandas en crear un completo caos desde 1989 o quizá un poco antes. Porque lo que aparece dentro de los medios, oficialmente es la publicación de algún concierto o cosas por el estilo, ya que usualmente las bandas se comienzan a formar algunos años antes de su primera aparición en vivo. Por lo que, la historia de la banda es incierta en muchos sentidos, pero que dentro de la reedición hecha por Xtreem Music en el 2012, existen varios datos de cómo empezó esta banda y de que banda japonesa fue influenciada, la cual fue Asphyxia. Luego nace “World” (1992), de ahí la banda se desune al año siguiente y forman otro proyecto llamado Force, una banda mucho más grindcore, pero sin mucha luz de por medio.
“World” (1992) de Multiplex es un disco difícil de entender a primera instancia, porque no tiene los clásicos conceptos de como escuchar Death Metal, o hasta Grindcore o Noise, sino que es un híbrido extraño, que a cualquier amante del estilo choca. Pero de muchas apreciaciones sobre el álbum y el revuelo que causo su reedición, la música en general es de las más originales a nivel general en 44 minutos experimentales, brutos, psicóticos, fuertes y de muchas ideas personales, que jamás se volvió a escuchar en otra banda. Ni siquiera en su segundo proyecto llamado Force. Por eso, desde que todo empieza con “M.I.C. (Military Industrial Complex)” y termina con “Hypocritical Instinct”, la música es un caos extremo, death metal de muchas ideas originales para un país que jamás supo apreciar lo que tuvo entre manos, y menos ahora que solo unos pocos conocen esta banda como un gran referente del Death Metal en su país, porque a comparación de Hellchild y Trangressor, lo que tenía Multiplex entre manos tenía para desarrollarse de una manera original, pero lastima que no continuo.
Como cualquier estilo dentro del metal, el Thrash Metal fue un estilo que acaparo miradas y oídos en todo el mundo, y los japoneses no serían la excepción. Porque Negarobo llegaría al mundo a finales del los 90s bajo su primer nombre Nigarobo, ejecutando un Thrash Metal insípido e influenciado por el área estadounidense hasta 1994. Luego en 1995, la banda decide cambiarse de nombre al que se conoce y con el cual presentaron este primer álbum llamado “Emergency” (1997), teniendo dos años diferencia desde que se cambiaron de nombre, y el cual cambia de estirpe musical, y decide seguir en una idea mucho más Thrash / Death Metal influenciados por Sepultura, que te recuerda al “Arise” (1991) o “Beneath the Remains” (1989). Pero teniendo entre su alienación a Masayuki Suzuki, baterista de los míticos Loudness de su país.
“Emergency” (1997) de Negarobo, es un disco que no es para nada complicado, donde las ejecuciones de Masayuki Suzuki en la batería le daban un sonido superior al de muchas otras bandas de su país, porque los redobles que maneja desde que empiezas con “Nuclear” y terminas con “Emergency”, son para sacarse el sombrero, porque sientes que un baterista alejado del metal pueda tocar igual o mejor que Igor Cavalera. Luego el trabajo de Norikazu Ichikawa en al bajo es un elemento increíble de escuchar, porque en el resultado final, la nitidez de su ejecución es demasiadamente clara, sobrepasa en muchos aspectos al sonido de las guitarras de Minoru Sumita y Masashi Hayasaka. Siendo esa clase de discos que tienen el perfecto balance entre música aguerrida y pesada, pero que paso desapercibido por muchos fanáticos del estilo, porque existe demasiado material bueno dentro de los 30 minutos, que es imposible decir ¿Por qué no continuaron?... Las razones que alguna vez dio a conocer Masayuki Suzuki, fue que la banda no encajaba más con el nombre y por eso se cambiaron a No More Pain, pero sin él como baterista y sin el bajista, tuvieron otra historia muy distinta a la que lograron plasmar acá.
Otra banda japonesa que empezó con otro nombre, el cual era Mentally Infected, el cual tuvo su uso entre 1995 y 1998, porque luego la banda cambiaría a Rise Above. Nombre sacado de una canción de los icónicos Napalm Death. Entonces, desde 1998 la banda estuvo activa hasta inicios de los 2000s, 2001. Pero como toda idea de bandas de gran potencial, pero que desaparecieron con el tiempo, era el auge donde habían sido formadas, porque dedes 1998 al 2005, la escena metalera tradicional y mundial tuvo un quiebre tremendo y casi nadie se fijaba en bandas que no sonaran a Slipknot, Korn, Deftones, etc. Siendo ese el destino que la banda tuvo, y aunque, ellos pudieron sacar un álbum más llamado “I Love to Relax” (2001). Este tuvo como efecto casi inmediato cerrar la banda después de lanzado el disco, además de ser un disco mucho más grindcore que Death Metal.
Cuando hago este tipo de recomendaciones es increíble recordar muchas cosas, ver portadas nuevas y viejas de estos discos, y de como muchas de estas bandas jamás pudieron pasar la prueba del tiempo y casi nadie se acuerda de estos discos o estas bandas, porque como lo dije, no marcaron un antes o después dentro de la escena mundial, pero ayudaron a crear una escena más robusta a nivel general. Entonces, “Sound Systematic Grind” (1999) de Rise Above sin necesidad de ser un disco que marco un hito, es una joya infravalorada dentro del estilo, porque tiene todos los elementos grindcore y death metal balanceados al máximo, desde que todo empieza con “Spin Away” y termina con “Untitled”, donde los 27 minutos se pasan volando, y todos los músicos mostraban una madurez que muchas bandas hubiesen querido tener en una primera producción.
Cuando veo en el tiempo, y escucho a Subconscious Terror, y veo que empezaron en 1994. Muchas veces me pongo a pensar de porque esta banda jamás capturo la correcta atención de los medios, porque era una banda increíblemente buena, donde lo técnico, lo nítido y lo Death Metal se unían de una manera magistral sin llamarse Brutal Death Metal o Technical Death Metal. Solo Death Metal a secas y como todos los conocedores del estilo deberían conocer. Y es cierto, el disco fue editado en CD-r la primera vez, y quizá eso haya espantado a muchos, pero la música era lo que importaba, porque son 45 minutos de música intensa y muy bien hecha, salvo por la portada que tiene un defecto de impresión en la idea original. Pero en la versión remasterizada y reeditada con su segundo álbum, la nueva impresión de la portada le da una nueva vida, pero a nivel musical el sonido de 1996 ya tenia demasiada perfección.
“Invisible” (1996) de Subconscious Terror, es una entidad bastante interesante, porque se trata de un justo, aunque tardío, homenaje al híbrido técnico/progresivo thrash/death metal que campaba a sus anchas a principios de los 90s, aunque esta formación no suena exactamente a ninguno de sus representantes de aquellos tiempos optando por un estilo diverso y laberíntico. Esta entrega desde que empieza con “Sacrifice of Technology” y termina con “Brain Wash”, es sorprendentemente y se aleja de la excentricidad y la rareza tan características de la escena nativa de los chicos. Siendo un conjunto muy enigmático, cuatro muchachos supuestamente de Osaka, que nunca han revelado sus rostros al público, sin información sobre ellos en ningún lugar. Una formación muy cercana a lo invisible de hecho... ¿una pieza tangible de nuestra realidad, o un producto impertinente de nuestro subconsciente? Toda una magia de disco.
Transgressor es otra de las bandas más viejas del mundo japones, porque estuvieron activos desde 1988 bajo el nombre de Gamvetta, luego decidieron cambiarse al que se conoce y con el cual lanzaron uno de los discos más conocidos de la escena japonesa de los 90s. Pero en su momento fueron muy pocas las personas que pudieron adentrarse dentro de su música, porque como lo dije, no tenía particularidades y tenía una idea primitiva que le daba mayor desinterés para los oídos que estaban en otros universos estadounidenses, suecos y demás. Así que la banda, debido a su poco auge, decide cerrar sus operaciones en 1993, un año después de haber lanzado “Ether For Scapegoat” (1992), pero eventualmente la banda se reunía para conciertos, sacar algunas producciones al aire, y ver que pasaba con el apoyo de la gente, porque, aunque sea una banda de más de 30 años y que su único álbum a la fecha este cumpliendo 30 años. Como lo dijeron Yoshiro y Takashi, ahora residentes en Anatomia, la gente no apoyaba al estilo en su momento y menos a la banda.
En esos años solo pude conseguir años después su música en cinta, pero jamás me olvide de conseguir la copia en su versión en CD, así que, gracias a que todo esta siento reeditado hoy en día y remasterizado. “Ether For Scapegoat” (1992) de Transgressor cumple una nueva vida, y fue ahí que pude conseguir el disco para escucharlo con algunas versiones en vivo y de recopilatorios perdidos en el tiempo gracias a Memento Mori. Porque desde que todo empieza con “Whiteness” y termina con “Limbless Doom”, la pesades extrema, lo arcano de sus ritmos, y la idea primitiva de su música con un bajo altamente sepulcral y teclados que cada cierto tiempo encajan como un tormento en la herida, son los principales elementos que su música tiene de por sí, y a ello todo ese efecto de guitarra latoso aun por pulir, tienen ese no sé, que le da importancia y personalidad que otras bandas de su país no tienen. Y aunque no sea una idea exportable, y solo siga patrones de otras de su época, la música en sus 43 minutos, es salvajemente primitiva.
Una banda que ni bien se formo en 1997, y presento sus primeras demostraciones al mundo como son “In the Name of Vomit” (1997) y “Brutally Violated” (1998). Causo un revuelo en aquellos que no seguían la escena Nu Metal o New Metal de esa época, y la escena Brutal Death Metal estaba ganando terreno, por eso es que en pro de esa idea y del auge que tuvo Vomit Remnants con ambas producciones, ellos junto a Hibernia Productions decidieron recopilar ambas demostraciones en cinta para que más personas los conozcan, siendo ahí que esa recopilación llegó a mis oídos. Y mi sorpresa fue como aquel viento intenso que te pega en la cara de la nada, esa fue mi reacción. Así que con esta idea y de muchas opiniones de gente como Deeds of Flesh, Dying Fetus, Devourment, Internal Bleeding y más, recomendando al máximo a estos japoneses, era imposible que una primera larga duración no se veía en su futuro.
Después de los tremendos elogios que recibió ambas demostraciones, “Supreme Entity” (1999) llegó al mundo, y todos aquellos que querían escuchar Brutal Death Metal de altísimo nivel, tenían que escucharlo de manera obligatoria, porque se sumaban a esa idea groove y cuasi Slam técnica, influenciada por el área neoyorquina de bandas como Suffocation, Afterbirth y más. Tenían una idea concreta de como querían hacer su música, y por ello, desde que todo empieza con “Putrefying Dead Flesh” y termina con “Murderous Thoughts Determined”, la música es brutalidad en todos los sentidos, y aunque la batería suene extremadamente producida. No importaba, porque el disco era un trallazo completo en 28 minutos de pura brutalidad. Por eso, muchas gracias por este disco “Dr. Green”. Con 2 estilos principales de voces, voces realmente bajas y brutales, y voces agudas y chirriantes, y a veces una mezcla de las dos, la voz es una de las mejores partes, mostrando la mejor percusión y riffs del álbum. Las guitarras están afinadas muy bajas y tienen un sentimiento realmente muerto y tenue (excepto por los riffs principales y todo eso). Todo un tributo al Brutal Death Metal y su camino por tomar el lugar de muchas bandas.