17 de Marzo del 2023 | |
Estados Unidos | |
Comatose Music | |
Death Meta,Black Metal |
Aunque parezca increíble de mencionar o creer, bandas como Whore of Bethlehem y su mezcla bien cuidada de Brutal Death Metal y Black Metal, sabe como distinguir y traer curiosidad al oyente, porque a pesar de ser un estilo cuadrado, la música de esta banda siempre le da en el clavo de la curiosidad desde aquel contundente primer álbum llamado “Upon Judas' Throne” (2014). Entonces, luego de 9 años y presentar las cosas sin temor a equivocarse, tenemos su tercer álbum en estudio llamado “Ritual of Homicide” a través de Comatose Music. ¿Seguirá manteniendo su curiosidad por el Black Metal dentro del Brutal Death Metal de siempre?... Pues veamos.
Un detalle que me comento Sergey de Ominous Scriptures en una pasada entrevista, es que las bandas de Texas en Estados Unidos, siempre tienen ese factor de mezclar la oscuridad del Black Metal con lo brutal del Death Metal. Y eso siempre fue así desde los 90s, siempre buscando la manera de encontrar su propia manera de hacer Brutal Death Metal dentro de una escena que lo había creado desde finales de los 80s. Entonces, este tercer disco de Whore of Bethlehem llamado “Ritual of Homicide” deja en muchos sentidos su lado brutal y se centra en ser una banda de Death Metal con ritmos acelerados y partes blackers que difieren bastante de sus anteriores producciones. Quizá no sea lo esperado por que estas acostumbrado a que su música sea más brutal, pero el cambio de Brutal Death Metal a Death Metal más directo funciona muy bien y la banda no se complica a nivel general, y esta vez las canciones van mucho más al hueso del genero de muerte que muchos preferirán.
Desde que todo empieza con “Enlightenment Through Pain” y termina con “Pseudochrist”, la música no sale de los parámetros conocidos del Death Metal y Black Metal, presenta una secuencia rítmica envasada en el Death Metal estadounidense, con ese sabor Black Metal de escuela escandinava. Y ojo que le pongan blast beats, y la batería sea acelerada no lo hace Brutal Death Metal, porque si no Dark Funeral o Marduk desde sus inicios hubieran sido Brutal Death Metal. Así que la música esta vez, y de una manera muy astuta en sus 37 minutos tiene algunas partes groove creadas por la guturación de James VanDenBerg, quien le da algo interesante al disco. Pero luego canciones como “Sermon of the Malignant Spirit” beben completamente de influencias blackers y con ese sabor oscuro y retrata perfectamente lo que pasa en la portada, estar en pleno juicio de los condenados.
“Ritual of Homicide” de Whore of Bethlehem decide bajar la intensidad técnica en los riffs, y ahora se centran en ser una maquina Death / Black Metal, pero de aquellas duras y potentes. Donde todo entra como puñetazo en la cara. Buen disco, que no necesita de más para ser contundente.
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